Principado de Montenegro Índice Surgimiento Independencia Referencias Bibliografía Menú de navegación
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Himno nacional: Ubavoj nam Crnoj Gori | |||||
Localización del Principado de Montenegro. Principado de Montenegro en 1862. | |||||
Capital | Cetinje | ||||
Idioma oficial | Serbio | ||||
Religión | Cristianismo ortodoxo | ||||
Príncipe | |||||
• 1852-1860 | Danilo | ||||
• 1860-1910 | Nicolás I de Montenegro | ||||
Primer ministro | |||||
• 1905-1906 | Lazar Mijuskovic | ||||
• 1906-1907 | Marko Radulovic | ||||
• 1907 | Andrija Radovic | ||||
• 1907-1910 | Lazar Tomanovic | ||||
Historia | |||||
• Secularización | 13 de marzo de 1852 | ||||
• Congreso de Berlín | 13 de julio de 1878 | ||||
• Elevación a Reino | 28 de agosto de 1910 | ||||
Superficie | |||||
• 1910 | 9475 km² | ||||
Población | |||||
• 1910 est. | 317 856 | ||||
Densidad | 33,5 hab./km² | ||||
Moneda | Perper |
El principado de Montenegro fue un Estado del sudeste de Europa que existió desde el 13 de marzo de 1852 hasta el 28 de agosto de 1910, cuando fue proclamado como reino por su príncipe Nicolás I, quien se convirtió en rey.
Su capital era Cetiña y el perper montenegrino fue su moneda a partir de 1906. El territorio del principado consistió aproximadamente en el área central del Montenegro moderno. El Estado era una monarquía constitucional, pero de facto absolutista, y un Estado nación de los serbios.[cita requerida]
Índice
1 Surgimiento
2 Independencia
3 Referencias
4 Bibliografía
Surgimiento
En 1851, tras la muerte del intrigante obispo y príncipe Pedro II de Montenegro, que había participado en las infructuosas maquinaciones antiotomanas de los Gobiernos conservadores serbios, ascendió al trono del obispado su sobrino, Danilo.[1][2] Este separó[2] el cargo eclesiástico del civil y continuó la tarea de modernización del diminuto territorio; aprobó un código legal (1855)[2] y organizó un primer Ejército regular.[1] Por entonces Montenegro seguía siendo una tierra minúscula, habitada por unas ciento treinta mil personas, organizadas en una treintena de clanes.[1] Los montenegrinos cruzaban continuamente la frontera del territorio, aún dependiente del imperio aunque autónomo para los otomanos, en sus desplazamientos con el ganado y en sus incursiones.[3]
En 1853 el principado hubo de solicitar el auxilio de las potencias ante el avance del enérgico gobernador otomano Omar Bajá, que penetró en Montenegro tras el intento montenegrino de apoderarse de Žabljak.[2] Austria, que prefería como vecino de Dalmacia al pequeño principado antes que a los otomanos, puso fin a la invasión.[2] Por imposición austriaca, Montenegro no aprovechó la guerra de Crimea para arrebatar tierras a los otomanos, lo que desencadenó una nueva revuelta de algunos clanes contra el príncipe, que fue sofocada.[2]
En 1857 los montenegrinos participaron en la revuelta de la vecina Herzegovina contra los otomanos.[4][2] La zona era territorio habitual de las correrías montenegrinas.[5] La intervención de las potencias, en especial de Francia, permitió poner fin al conflicto con el Gobierno de Constantinopla y definir por fin los límites del principado, reconocido oficiosamente por entonces.[4][6] La contienda permitió asimismo la ampliación del principado hacia el norte, en torno a Grahovo.[6]
El asesinato de Danilo en 1860 entregó el trono principesco a su último señor, Nicolás I, de largo reinado.[4][6] Este colaboró también con Serbia, pero esperaba ser nombrado soberano si los dos estados serbios se unían.[4]
Independencia
El Congreso de Berlín de 1878 reconoció la independencia del principado.[7] Le permitió además duplicar su superficie hasta los 9433 km²; los nuevos territorios contenían 116 000 habitantes (26 000 de ellos católicos y otros tantos musulmanes) y con ellos el principado alcanzó los 286 000 habitantes.[7] El soberano siguió siendo Nicolás I, que gobernaba autocráticamente.[7] El nuevo país estaba casi rodeado por territorio del Imperio austrohúngaro que, además, había quedado encargado por las potencias de vigilar las reducidas costas montenegrinas para evitar que llegasen a ellas buques de guerra, posibilidad prohibida en Berlín.[7]
Pese a la influencia austrohúngara, el Gobierno siguió recibiendo subsidios rusos, que le permitieron extender la enseñanza primaria y reducir el analfabetismo masculino al 50 % en 1900.[7] Por entonces el país seguía siendo primordialmente rural: la población urbana, unas 31 400 personas, no suponían ni el 11 % de la población nacional.[8] Los universitarios montenegrinos se formaban principalmente en Belgrado y, en menor medida, en Zagreb.[9]
El principado sufrió la emigración de parte de su población a la vecina Serbia, donde se asentó principalmente en las regiones fronterizas abandonadas por los musulmanes.[9]
En 1905 Nicolás otorgó una Constitución que, en realidad, no cambió el hecho de que el poder siguió en sus manos, pese a la creciente oposición de la escasa intelectualidad formaba en Serbia.[10] El gesto fue esencialmente una manera de mejorar su imagen en el extranjero y atraer inversiones.[10] La Asamblea Nacional, que se elegía en parte en voto público, fue disuelta en 1907.[10] La oposición política pasó a la clandestinidad.[10] El convencimiento del príncipe de que Serbia apoyaba a los opositores tensó las relaciones con el país vecino.[10]
Para celebrar el cincuenta aniversario de su ascensión al trono, Nicolás se proclamó rey, transformando con ello el Estado de principado en reino.[11]
Referencias
↑ abc Pavlowitch, 2002, p. 59.
↑ abcdefg Jelavich, 1994, p. 252.
↑ Pavlowitch, 2002, pp. 59-60.
↑ abcd Pavlowitch, 2002, p. 60.
↑ Jelavich, 1994, pp. 252-253.
↑ abc Jelavich, 1994, p. 253.
↑ abcde Pavlowitch, 2002, p. 73.
↑ Pavlowitch, 2002, pp. 73-74.
↑ ab Pavlowitch, 2002, p. 74.
↑ abcde Pavlowitch, 2002, p. 85.
↑ Pavlowitch, 2002, p. 86.
Bibliografía
Jelavich, Barbara (1994). History of the Balkans. Eighteenth and nineteenth centuries. (en inglés). Cambridge University Press. ISBN 9780521274586.
Pavlowitch, Stevan K. (2002). Serbia : the history of an idea. Nueva York: New York University Press. ISBN 9780814767085.